Nada más mudarte a Holanda no es probable que te compres un móvil de contrato, sino que en la mayoría de las ocasiones, al menos mientras no te estableces en el país, empezarás por uno de tarjeta. En principio el procedimiento es sencillo. Llegas a la tienda, escoges el aparato que quieres y hablas con el dependiente para que le cambie el idioma y otros ajustes básicos. Pero el proceso no acaba ahí.
Años atrás, encontrándome en esta situación y planeando abandonar los Países Bajos en sólo unos meses, pedí al encargado el teléfono más barato del catálogo. Mientras me preparaba el nokia más obsoleto del mercado, el chaval, pues ni a mi edad llegaba, comentó con sorna:
- ¡Bienvenido al club de los veinte euros!
Los bonos de recarga del móvil pueden adquirirse en diversos establecimientos holandeses como por ejemplo en el mostrador externo del Albert Heijn. Si dices cuánto dinero deseas meter en tu tarjeta te darán un resguardo que contiene un código. A continuación debes llamar a un número, escuchar varios mensajes pregrabados en el idioma local, pulsar una secuencia infernal de teclas y finalmente introducir el código que acabas de comprar. Si aprendéis a hacer todo esto y empezáis a defenderos en holandés, podéis hacer vuestras recargas incluso sin moveros de casa usando esta web, que vende códigos para todas las compañías telefónicas neerlandesas.
Sin embargo si al igual que yo en los primeros tiempos andáis más perdidos que Geert Wilders de paseo por la Meca, lo mejor es que vayáis directamente a la página de vuestra compañía telefónica y busquéis la opción de cargar directamente el móvil sin pasar por todo el proceso del código. Es muy sencillo, sólo tenéis que escribir vuestro número más el importe deseado y proceder a pagar (con tarjeta de crédito o cuenta bancaria holandesa). Quién lo supiera hace cinco años, cuando con verguenza pedía el favor a las dependientas del Albert y obtenía la consecuente mirada alucinada de quién desconoce el concepto de atención al cliente. Aquí os dejo los links de vodafone y t-mobile. Si tenéis otra compañía buscad en google "saldo opwaarderen" y seguramente llegaréis a páginas como las anteriores.
Esta es la historia de como entré en el club de los veinte euros y tanto me gustó que ahí me quedé. Sigo comprando y perdiendo nokias anticuados cada seis meses y cargándolos por internet como os explicaba en el párrafo anterior. Pero si este club no es para vosotros y ya habéis superado 1998, en este otro post os cuentan cómo meter una tarjeta holandesa en vuestro smartphone. Saludos.
"mirada alucinada de quién desconoce el concepto de atención al cliente"
ResponderEliminarMe quedo con esta frase, todo un estudio comparativo de la atención al cliente en Holanda (y Bélgica)..
Al menos, en el ticket de AH explica muy clarito (en holandés, claro) como cargar el móvil. Yo simplemente pedí a un dependiente que me lo tradujese...y me lo apunté :)
ResponderEliminarMi compañía tenia también una parte auditiva, te decía la grabación: si quere esto pulse tal, si quiere lo otro pulse cual. Al final, tras varias visitas al albert, tenia también mi papelico con todo el proceso apuntado :) Pero poder hacerlo por internet la verdad es una comodidad.
EliminarLa putada de NL es que las recargas són cerradas en cuanto a cantidad (10€, 20, etcétera), yo recuerdo que en España se podía recargar el importe que desearas. Al final, recurro a las "tarjetas" que hay en las cajas del AH y que con el ticket te dan el código para mandarlo a VF.
ResponderEliminarAh pues prueba el link the vodafone que puse arriba, ais puedes cargarlo también si te quedas sin saldo en medio de la noche o te olvidas en el super. Eso si, de nuevo con cantidades fijas como tu dices pero bueno que le vamos a hacer. Saludos.
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